Fragmento 2

Desde lo más alto ya solo me queda observar. Contemplar el mundo que una vez vi nacer y que ahora veré morir. Una vez se nos dió un don, pero lo que se toma como regalo bien puedo tornarse en maldición. no somos más que polvo en un estante de libros olvidados. Una simple mota arrastrada por el pasar de una historia ya perdida. Los recuerdos empiezan a desvanecerse y es entonces cuando creo poder ver mejor mi pasado, ¿Cómo es posible? Pero ahora solo queda el miedo al olvido, a que todo en cuanto creía no sea más que un mero destello en mi conciencia. Un destello que algún día quedará apagado tras el profundo sueño de mi existencia. Observar es lo que me toca ahora, desde el abismo de un horizonte infinito. La ventana al mundo que nos verá soñar...